domingo, 4 de enero de 2009

Nadie engana al mundo

De acuerdo con Alvarez Paz: Chavez=Pesimo Presidente=vinculacion al crimen organizado, a movimientos terroristas y de narcotrafico (FARC)=lavado de dinero=uso del dinero venezolano para comprar gobiernos externos=chantaje=mediocre militar=con vocacion tiranica=sin frenos morales = petropirata del caribe= de acuerdo
vdebate reporter

Hugo Chávez está más que descubierto ante el mundo. No es un demócrata. Tampoco es un estadista digno de respeto. Ha sido un pésimo presidente, incapaz de resolver ninguno de los problemas heredados de los gobiernos anteriores que, especulándolos al máximo, le facilitaron la llegada al poder en medio de grandes expectativas. El no fue causa originaria de ellos, sino una consecuencia. Pero esa consecuencia se convirtió en la causa real del agravamiento de todos y de la aparición de otros problemas nuevos, tan graves o mucho peores que los encontrados.

Bastaría con mencionar sus reconocidas vinculaciones con las estructuras del crimen organizado, instrumento operativo de muchos movimientos subversivos y terroristas en el continente y el mundo, el narcotráfico en todas las instancias del proceso, el lavado de dinero negro o, simplemente y a la vista de todos, la politización del hampa con patente oficialista como garantía de la más perversa impunidad. Usar los recursos del petróleo como instrumento de política para el chantaje, la violencia institucional dentro y fuera del país y el dinero que en cantidades industriales le ha ingresado al país, para comprar gobernantes extranjeros, respaldar causas rechazadas en el mundo entero y corromper a buena parte del país, serían razones más que suficientes para ponerle punto final a su mandato y destituirlo sin trámites, dejándolo en manos de la justicia penal nacional e internacional. Esto sucederá más temprano que tarde.
No caben dudas de que el mundo entero lo visualiza como un mediocre militar venido a más. Autócrata, totalitario con vocación tiránica y dictatorial. Ha destruido la democracia venezolana desde la democracia misma, manipulando por las buenas –y por las malas también– el orden jurídico y las instituciones. Sin formación ni principios, sin frenos morales ni limitaciones éticas. Para colmo de males, Chávez utiliza como coartada el cuento de un “socialismo del siglo XXI” con el cual disfraza la pretensión de imponer un comunismo a la cubana. Jorge Quiroga, ex presidente de Bolivia, lo ha llamado el “petropirata del Caribe”.
Ahora Hugo Chávez está en el peor momento de su mandato. El país sufre la peor tragedia de su historia republicana. La mayoría la considera una responsabilidad exclusiva del presidente. El cual sólo dejará como legado la actuación más ineficiente y corrompida de que tengamos conocimiento. Si en Venezuela los procesos electorales hubieran sido limpios y la voluntad popular respetada, hace tiempo hubiera dejado la presidencia del país. A pesar de que el sistema electoral continúa envenenado integralmente, ha sufrido aparatosas derrotas que ni con la complicidad de todas las ramas del poder público han podido disimular el enorme rechazo a un régimen perverso y agotado.
Tiene razón el Washington Post. Para imponer la reelección indefinida Hugo Chávez tendrá que apelar al fraude y la fuerza. Perderá aunque la votación que se anuncia como referéndum no sea “ni libre ni justa”. Bien dicho, aunque le duela al tarugo del circo que hace las veces de canciller.
Autor: unvenezolanomas

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