Otro juramento roto

Bueno, sabiendo como trabaja el gobierno venezolano, el servicio que dará dentro de 6 meses:
- Buses retrasados.
- Robos en los autobuses.
- Buses deberán llevar a la gente de las marchas.
- Etc, etc.......

VenEconomía Opina 25-09-2007
Otro juramento roto
Desde abril los transportistas del sector privado están en ascuas y con temor ante la incertidumbre de lo qué pasará con ellos y con las 250 mil unidades que representan la fuente de subsistencia para sus familias.El pasado 25 de abril, se publicó en la Gaceta Oficial el Decreto Nº 5.307 que crea la empresa "Sistema Integral de Transporte Superficial, S.A." (Sitssa), adscrita al Ministerio de Infraestructura.Con esto el Gobierno incursionará con su "política social" en el transporte público, estudiantil, turístico, urbano, interurbano, nacional e internacional. Además de fomentar la idea de un "transporte estratégico" como apoyo a organismos públicos, Sitssa también intervendría en todo tipo de inversiones en materia de transporte y asesoramiento técnico.Actualmente el transporte público terrestre en Venezuela opera de la mano del sector privado, organizado desde hace más de cuatro décadas en asociaciones cooperativas y asociaciones civiles. Ahora, con la empresa Sistema Integral de Transporte Superficial, S.A., el Estado con todo su poder económico y "legal", competirá de manera poco transparente y desigual con los trabajadores del sector.Hace un par de meses, ese temor casi prende una "candelita" cuando los transportistas reclamaron al Gobierno esta incursión en su campo de trabajo. Sin embargo, éste muy "hábilmente" la apagó mediante dos tácticas: La primera con las ya usuales intimidaciones de quitarles los créditos y los subsidios que reciben una gran mayoría de estos trabajadores por sus unidades. La otra, con la amenaza de revocarles sus concesiones, algo en lo que ya es experto el Gobierno. Además, en esa oportunidad, las autoridades les juraron y perjuraron a los transportistas que Sitssa no entraría a competir con los conductores, pues ésta "sólo se encargaría del transporte de los estudiantes y de las personas de la tercera edad".Pero este juramento, como todos los del Gobierno de Chávez, se rompió.La Línea de Transporte Social del Gobierno ya comenzó a operar desde el terminal de Oriente, imponiendo tarifas Bs.10.000 por debajo de las del mercado. Las intenciones parecen estar claras: El afán de exterminar todo vestigio de iniciativa empresarial y de "explotación capitalista", sustituyéndola por explotación estatal, de manera desleal. Pero, las ambiciones del Gobierno no quedarán aquí. El decreto es tan amplio que sin duda luego vendrán por los transportistas de las rutas urbanas.Al final, mientras el Estado sigue reservándose todo medio de producción para sí, a los ciudadanos de "a pié" no se les soluciona sus problemas reales de transporte y vialidad. Así el ciudadano seguirá por las mismas calles maltrechas, deterioradas, colapsadas y obstaculizadas por la basura..

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