McCain: Un politico de dos caras?

No lo puedo creer que McCain este de acuerdo con esta ley. Bueno gracias a dios que no gano. No me gustan ni los republicanos, ni los democratas.........

vdebate reporter

Un político de dos caras
El senador por Arizona se suma al extremismo antiinmigrante local para buscar la reelección

TEXTO J.JAIME HERNÁNDEZ•CORRESPONSAL
El Universal
Sábado 24 de abril de 2010

WASHINGTON.— Durante los fragores de una histórica campaña por la Presidencia en 2008, el entonces candidato demócrata, Barack Obama, acusó a su contendiente republicano, John McCain, de ser un “político de dos caras” acostumbrado a engañar a la comunidad latina para conseguir su voto.

Considerada en aquel entonces como una acusación excesiva y una ofensa contra el hombre que más capital político había empeñado en la propuesta de reforma migratoria de 2007, estas palabras vuelven a perseguir hoy al veterano senador por Arizona durante la campaña que decidirá su supervivencia política en agosto venidero, durante unas reñidísimas elecciones primarias que le enfrentarán a candidatos como J.D. Hayworth, un ex congresista mediocre que surgió de los suburbios de Phoenix y un popular locutor de radio que se ha convertido en un peligroso adversario gracias a su rabiosa retórica antiinmigrante.

A pesar de que el equipo de colaboradores de McCain insiste en que las elecciones primarias no representan un gran peligro para su jefe, lo cierto es que la diferencia de apenas cinco puntos porcentuales que le separan de Hayworth en las encuestas, no sólo ha conseguido que el nerviosismo se haya instalado en sus cuarteles de campaña, sino que se ha convertido en la principal razón de una metamorfosis que hoy ha hecho de John McCain un ferviente antiinmigrante.

Obligado a renunciar a sus posiciones de centro, McCain se ha visto en la necesidad de radicalizar su postura para tratar de mantener su escaño senatorial. Durante este proceso, el político que alguna vez fue adalid de la causa inmigrante ha terminado por abrazar las posturas extremistas que repudió en el pasado, mientras la comunidad hispana constata que las acusaciones que alguna vez le lanzó Obama se han convertido en realidad.

Apuesta arriesgada

Para un nutrido grupo de líderes políticos y religiosos vinculados a la lucha de los inmigrantes, el respaldo de McCain a la ley SB1070, aprobada ayer por la gobernadora republicana, Jan Brewer, lo ha convertido en el compañero de viaje del sector más radical del Partido Republicano, particularmente en el espinoso capítulo de la inmigración indocumentada, y ha confirmado su apuesta por una arriesgada estrategia de supervivencia política. “Los bandazos de McCain hacia la extrema derecha son vergonzosos”, consideró Martine Apodaca, portavoz de la organización Reform Immigration For América, al lamentar la renuncia del senador por Arizona a su legendaria independencia para apostar por el “haz lo que sea con tal de ganar” unas elecciones.

La estrategia electoral de McCain, quien se ha visto obligado a pedir la ayuda de Sarah Palin y del movimiento del Tea Party (adonde se han reciclado algunos de los más importantes activistas del movimiento antiinmigrante de los Minuteman), no ofrecen ningún tipo de garantía, y sí muchos riesgos.

“Aunque el recurso antiinmigrante puede resultar atractivo entre las filas republicanas durante unas elecciones primarias, en el largo plazo se convierte en una estrategia de perdedores”, consideró Rank Sharry, director ejecutivo de America’s Voice y uno de los hombres que colaboraron en el pasado con McCain.

“Y en este sentido, las elecciones que enfrentarán a McCain y Hayworth serán una prueba de si acaso los republicanos han aprendido o no del pasado”, añadió Sharry en referencia a la larga lista de candidatos republicanos que han perdido en las urnas, mientras convertían a la comunidad inmigrante en cabeza de turco de las frustraciones y los prejuicios racistas del sector más radical y atrabiliario del partido.

Por el momento, la arriesgada apuesta de McCain —incluido su apoyo a una legislación como la SB1070, que le valdrá el repudio de los electores hispanos en Arizona—, ha conseguido elevar las apuestas entre quienes, desde las filas del propio Partido Republicano, apuestan a favor de su derrota. “Muchos en Arizona y en Washington estarían dispuestos a pagar una buena cantidad de dinero para ver cómo encajan a McCain una humillante derrota”, aseguró el analista Michael Gerson. Quizá por ello, “una derrota podría ser buena para el alma de McCain. Pero seguramente sería mala para su partido y para el país”, sentenció Gerson.